Ciudades iluminadas – Plazas, estaciones y parques. La luz al servicio de los lugares públicos

Entre áreas peatonales y limitadas al tráfico, una plaza se abre de forma imponente.

Las reflexiones de nuestro observador se concentran en la «decoración» de este lugar, cuya finalidad es crear el sentido de colectividad, un espacio que diga a los ciudadanos: «podéis sentaros, charlar, reuniros». Las plazas son el lugar en el que el individuo se sumerge en lo público.

El salón de la ciudad está amueblado con bancos, parterres y elementos arquitectónicos iluminados. Abajo, los parterres y los árboles están iluminados de abajo a arriba con luces ascendentes, y los bancos están flanqueados por estructuras con perfiles lineales de luz difusa.

Las plazas más antiguas del mundo se encuentran probablemente en Italia; para iluminar amplios espacios y monumentos históricos sin dañarlos, se puede pensar en utilizar proyectores fijados a los postes como en bandera, como en las fotos de abajo.

Si, por el contrario, el proyecto de iluminación se articula dentro de la creación de un nuevo espacio de agregación, es posible pensar en el factor luz de forma innovadora, como valor añadido y sin limitaciones técnicas: entonces la luz puede aspirar a convertirse en experiencia, a definir un lugar desde el punto de vista de su identidad y del uso que el ciudadano hace de ella.

Estos píxeles luminosos, como loes ve el dron desde arriba, son en realidad cuadrados realizados con perfiles de luz difusa montados en cajas de empotrar hechas a medida para el proyecto, han adquirido una función «interactiva» inesperada, convirtiéndose en el escenario ideal para selfis y fotografías, como si se tratara de un podio luminoso; al fondo la magnífica vista de la mezquita de Estambul.

De esta experiencia partió nuestra reflexión sobre la instangramabilidad de las ciudades y sobre cómo perseguirla a través de la luz en un espacio poco transitado por los turistas.

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Los aparatos de iluminación pueden personalizarse por características estéticas, electrónicas, ópticas y del LED.
¿No es suficiente? ¿Estás pensado en un aparato ex novo? Ponnos a prueba.

 

Un paseo urbano que se precie no puede dejar de considerar que la calle está bordeada de edificios y palacios, que constituyen la arquitectura de un centro urbano.

Las realizaciones que proponemos a continuación no pretenden agotar el tema, sino solo dar la oportunidad de reflexionar sobre el papel de la luz en las fachadas.

Comunicación y distinción de una marca (foto 1), estetización de un barrio que de otro modo sería gris y anónimo (foto 2), son muchos los objetivos que la iluminación aplicada a las fachadas puede conseguir.

📰 Lee aquí nuestros artículos sobre iluminación de fachadas.

Después de sobrevolar poéticamente las fachadas de los edificios de la ciudad, volvamos por un momento a nuestro flâneur con los pies en el suelo para observar los aparatos empotrados en el suelo urbano.

🔶 En la elección de soluciones de empotrados para exteriores en contextos ciudadanos, el grado de protección contra la introducción de polvo y humedad es un factor determinante. Nuestros héroes deben garantizar un grado de protección IP54 (protección contra sólidos de dimensiones inferiores a un milímetro y contra el agua).

🔶 Abramos aquí un pequeño paréntesis y dotemos al flâneur de una visión supersónica para la ocasión, capaz de ver más allá de lo visible y de sondear las cajas de empotrar de instalación de los empotrados. Pongamos el caso de un espacio realizado con una colada de cemento en el que tenemos que instalar un aparato con grado IP68, pero el drenaje normal del agua de la caja de empotrar no es posible. Tenemos la posibilidad de elegir una caja de empotrar que, con el producto instalado, permite obtener un grado de protección IP68. De hecho, la caja de empotrar en cuestión está equipada con una junta y unos prensaestopas que impiden la entrada de agua y mantienen el aparato seco: por lo tanto, es hermética y no requiere que se drene el agua.

🔶 ¿Y si nuestra elección recayera en un aparato con ópticas orientables?
Una gran ventaja es poder orientarlos sin abrirlos, por lo que no se corre el riesgo de comprometer la protección al exponerla a la humedad atmosférica. De hecho, abrir los aparatos en días de lluvia o en zonas de alta humedad puede provocar la formación de condensación en su interior.

Existen varias tecnologías para orientar la emisión luminosa sin abrir el aparato:

- El imán;

- El control remoto para gestionar las ópticas motorizadas;

- La orientación a través de un eje o un perno situado en la base del aparato.

🔶 Nuestro alter ego vagabundo, en horas de la noche o antes del amanecer, se cruza con los trabajadores municipales que se ocupan de la limpieza de espacios públicos con chorros de alta presión y alta temperatura y con hidrolimpiadoras. El grado de protección IP69K garantiza el correcto funcionamiento y la resistencia a largo plazo, incluso cuando el producto se somete a lavados diarios de este tipo.

Con el dedo apuntando al mapa de la ciudad, seguimos al protagonista de este paseo urbano que, en su deambular, se ha acercado a un gran aparcamiento. Vemos cómo empieza a razonar sobre el tráfico de automóviles y su impacto en los espacios urbanos y las intervenciones de iluminación.

Para soportar la carga de un coche, el aparato de iluminación tendrá que garantizar la transitabiliad -lo encontramos indicado en la documentación técnica con el valor en kg o kn del peso máximo soportado. Para que un aparato sea considerado transitable debe someterse a tres pruebas: carga estática, prueba de torsión y prueba de deslizamiento.

En la primera foto, los perfiles lineales empotrados en el suelo delimitan físicamente el espacio destinado al aparcamiento. En la segunda foto, el espacio de estacionamiento está creado por la luz, gracias a la óptica radial de los aparatos.

Un factor que no hay que subestimar en la ciudad es el vandalismo; para evitar cualquier posibilidad de manipulación que comprometa el funcionamiento del aparato, los productos pueden llevar tornillos especiales, conocidos como tornillos antivandálicos. Sin embargo, la presencia del tornillo de seguridad no tiene por qué comprometer la estética del producto, si se camufla utilizando el mismo acabado que el cuerpo.

Al salir del aparcamiento, el flâneur sigue visualmente un coche que se incorpora rápidamente al tráfico de la ciudad, deteniéndose en la entrada de una rotonda. Un espacio urbano camaleónico, la rotonda. Dependiendo de las decisiones tomadas por los urbanistas, puede ser totalmente anónima y mínima, o convertirse en una obra de arte erigida como símbolo de la ciudad.

Más allá de la iluminación necesaria desde el punto de vista funcional para garantizar la visibilidad y la seguridad en la conducción, en lo que sí podemos estar de acuerdo, viendo los proyectos realizados en los últimos años, es en que la labor de iluminación arquitectónica y, por tanto, la elección del aparato y sus características técnicas para una rotonda dependerán exclusivamente de su singularidad y del elemento arquitectónico que se desee exaltar.

La estatua de la foto de la izquierda está iluminada desde abajo hacia arriba con proyectores, colocados en la base blanca, mientras que en la fuente de la derecha son los proyectores de inmersión de color LED RGB los que imponen la personalidad y la peculiaridad de toda la obra.

El flâneur, cansado de caminar, llega a una estación para continuar sus andanzas en transporte público. Imaginemos que estamos allí por la noche, quizá en invierno, donde a veces todo está envuelto en una niebla fantasmal. ¿Os ha pasado alguna vez?

Las luces deben ayudarnos a orientarnos, facilitarnos el acceso y la utilización de los espacios y, por último, darnos una sensación de seguridad mientras esperamos impacientemente el último tren para casa. La recalificación de las estaciones con soluciones LED permite alcanzar estos objetivos al tiempo que se contienen los costes de energía y mantenimiento de la instalación.

Las estaciones, no lo olvidemos, también se encuentran en espacios subterráneos con pasillos, corredores y andenes para el metro, y la luz puede ser el elemento que da aliento y amplitud a estos lugares estrechos y a veces claustrofóbicos.

Con la elección de una óptica asimétrica, un aplique puede resolver la necesidad de iluminar la zona delante de un banco o una zona de pasaje lo que permite colocar unos pocos aparatos altura elevada.

Nuestro flâneur, hábil observador, nos hace notar que el mobiliario urbano puede ser una oportunidad para introducir instalaciones artísticas únicas y distintivas, que hagan agradable y vivo, enriqueciéndolo culturalmente, un espacio atribuido solo al paso.

Abajo la obra "Me.Here.Now" en la zona peatonal de la estación de London Bridge, del artista Mark Titchner.

Tras volver a la superficie, el flâneur se dirige al parque de la ciudad, sigámoslo mientras pasea por el pulmón de la ciudad. El espacio verde es ahora un elemento indispensable para la habitabilidad urbana, lo que ha llevado a las administraciones a encabezar las listas de las mejores ciudades según la atención que dedican a estos espacios. Pero lo que nos interesa aquí es dar vida nocturna a las zonas verdes públicas mediante el uso de la luz.

Una atenta iluminación permite utilizar espacios incluso cuando cala el sol. Aumentando la percepción de seguridad del ciudadano, éste sentirá ganas de sentir estos lugares como propios, en lugar de evitarlos por una correlación errónea "parque nocturno = delincuencia". Por tanto, la iluminación irá en los senderos y carriles bici, que atraviesan la hierba, y las zonas de descanso, como los bancos.

Sin embargo, la cuestión debe gestionarse siempre teniendo en cuenta que es necesario proteger el cielo estrellado de una iluminación excesiva.

Además de la seguridad y la facilidad de uso, la luz también puede actuar como un "filtro de belleza" en plantas y flores, resaltando las copas de los árboles, los troncos y los colores vivos, dándoles tridimensionalidad.

El discurso sobre la iluminación de las zonas verdes nos ha cautivado hace poco, si quieres sumergirte en la jungla tú también, mira los artículos Verde jardín 1, Verde jardín 2 y Verde jardín 3.

Amanece, las luces se apagan. El flâneur ha terminado su recorrido urbano nocturno y reflexivo y nosotros, que lo hemos seguido en este paseo, intentamos resumirlo así.

En la primera parte de "Ciudades iluminadas" señalamos cómo la luz puede permitir que los ciudadanos utilicen los espacios también por la noche y con seguridad y sentar las bases de la dimensión colectiva de la vida. Por último, una buena dosis de creatividad aplicada a la iluminación, ayuda a crear viralidad de fotos en las redes sociales en una escalada de efectos positivos para la ciudad, su comunidad y el turismo (a la espera de que se reanude pronto).

A lo largo de este artículo nos hemos centrado en espacios públicos concretos, como plazas o estaciones, para los que surgen de vez en cuando diferentes consideraciones sobre el uso de la luz y la elección de los aparatos.