Edificio residencial

LocalidadAndria, Italia
AplicaciónFachadas
Proyectoarch. Mariangela Alicino, Archingegno
FotosAlessio Tamborini

El estudio urbanístico de la red vial de Andria ha guiado el diseño arquitectónico de esta intervención residencial privada que se levanta en la confluencia entre dos calles no perpendiculares. El arquitecto aprovechó este “falso” nudo para crear dos fachadas distintas que convergen en el bloque delante del cruce donde se sitúan los enlaces verticales. El punto de conexión entre las dos paredes son las logias con los balcones que dividen visualmente la superficie en una trama cuadrangular que destaca aún más por la alternancia entre el revestimiento blanco y gris ceniciento.

El arquitecto Alicino y el ingeniero Di Liddo, del estudio Archingegno, han optado por enfatizar el marco interior de los balcones de una fachada con un hilo de luz. El mismo efecto de iluminación que se obtiene con el proyector Lyss 1.0 con óptica transparente de 10° x 180°, ha sido usado para iluminar las partes laterales de la rejilla estructural que actúa como telón de fondo de los balcones de la otra fachada.

La iluminación exterior se completa con los cuerpos de iluminación Tak 1.1 fijados en los techos de los balcones para iluminar los espacios abiertos de la superficie y con el aplique Kocca 3.1, que cuenta con una óptica muy estrecha de 7° que marca visualmente la pared de bloques angulares con una emisión de luz vertical que llega al suelo desde los 20 metros de altura.

El proyecto de iluminación continúa en el interior del edificio, estructurado en un gran espacio abierto conectado, a través de una escalera interna, al área de descanso subyacente. La gran sala de estar ha sido diseñada alrededor de una gran cocina que se extiende por todo lo ancho de la pared de fondo de la habitación. Han sido elegidos dos tipos de aparatos de iluminación L&L para iluminar la isla central: los downlights Esem Mini 1.6 con óptica de 27° empotrados en la marquesina para iluminar la barra snack-bar mientras que para la zona de la mesa de madera oscura han sido elegidos tres suspensiones Kora 1.0 que dirigen la emisión de luz con precisión sobre la superficie. Estos aparatos han sido elegidos en acabado verde reseda, una tonalidad que destaca deliberadamente respecto al blanco predominante y el gris ceniciento de la cocina, y que se encuentra también en la decoración dentro del mismo espacio abierto.

Un hilo conductor lo da el papel pintado diseñado ad hoc para los diferentes ambientes. En el hueco de la escalera cubre por completo el bloque del ascensor y se ilumina con efecto a ras, mientras que en los dormitorios el pequeño proyector Krill 1.0 fijado al techo dirige la emisión de luz hacia los laterales de la cama. La solución de instalación dual es original, en una habitación el proyector está empotrado en un pequeño nicho circular, en la otra ha sido fijado al falso techo mediante un elemento a juego (rosetón accesorio).